Perdida de la empatía
Tú solo tú, y nadie más que tú, el individualismo extremo en esta sociedad globalizada actual hace que las personas ya no se vean a los ojos; porque están mirando el celular, ya no platiquen con quien se sienta a un lado; porque tiene los audífonos puestos para encerrarse en su mundo. Que ya no admiren las hermosas cotidianidades de la vida, como el despertar o respirar, como el sonreír al desconocido para cambiar su papel de extraño a un amigo.
Entre tantas cosas terribles que pasan en este mundo están en escasez los actos sencillos de bondad y empatía por el extraño y por la vida , una de las pocas situaciones en las que tenemos oportunidad de lograr cambios.
Pero ¿por qué sucede esto? quizá por el miedo en el actual contexto de violencia, o la desconfianza de dar información de más por saludar con una sonrisa al vecino, el temor de salir al parque por que te pueden asaltar, o el terrible estigma del que dirán los demás.
La empatía con el otro, y por lo tanto con la vida, se ha perdido en esta sociedad y es un problema tan grave y creciente que parece inexistente pero es tan real y fehaciente como que el otro existe
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